LAS
6 ARTES ANTIGUAS
En
la antigüedad en el mundo se paseaban las 6 artes.
La Arquitectura,
firme, esbelta con la lucidez del mármol siempre se le veía seria y de poco
conversar. El con sus constantes de ánimo envolvía al mundo en un vaivén de emociones, expresión
y gestos curiosos. La poesía siempre elegante, sutil y con estilo paseaba su
forma letreada, por los ecos del mundo.
La
Pintura era traviesa siempre pintada y coloreando cada estancia donde se encontraba.
La escultura de gestos fuertes y pausados siempre andaba callado inmóvil,
buscando la oportunidad de crear cosas
con sus manos.
Se
podría decir que la escultura casi nunca habló, que sus manos lo hacían por
ella.
Ahora
bien la pequeña música era la más joven de las artes antiguas con algo de
timidez y paciencia, vivían entre los demás.
Poesía,
una bonita voz, una sutil combinación de sonidos graves y agudos. Pero más
impresionante resultaba su habilidad para ejecutar la lira y la viruela.
Las
seis bellas artes andaban por todo mundo, amenizando embelleciendo e
inmortalizando cada lugar con sus obras singulares y únicas.
La
pequeña música se veía siempre opacada por las demás bellas artes, esto hacia
que se retirara a estancia que no es a crear melodías tristes y
melancólicas. Muchas veces a si se la
pasaba la pequeña.
Un
día como de tantos otros se encontraron músicas aisladas, lejos de las demás
con un rostro de tristeza y melancolía: en eso poesía se acerca y le pregunta
que le pasaba y porque estaba así, entonces la música le dice: que se siente
incompleta, que siente que no pude
expresarse en su totalidad, entonces poesía, empezó a cantar y a
pronunciar más dulce de sus existencia.
Entonces
música quedo impactada y comenzó a ejecutar la lira, exponiendo al mundo
armonías perfectas.
Hacían
el mundo perfecto, Música y Poesía, desde entonces fueron inseparables
mostrando siempre al mundo la más sublime de todas las artes.